El embajador argentino en Brasil, Daniel Scioli, reclamó ayer que el Frente de Todos (FdT) vaya a elecciones Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO) para definir quién será el candidato del oficialismo a la presidencia en las elecciones de octubre, carrera en la que él mismo se anotó: “Tengo derecho a competir”, enfatizó.

De esa manera, Scioli se mostró en contra de la idea de generar una lista de unidad en el peronismo, y partidario de que haya una competencia interna con más de un precandidato, en la misma línea de lo que había expresado el Presidente de la Nación, Alberto Fernández, cuando anunció que él no iría por la reelección.

“Con mucho énfasis reclamo mi derecho a participar de las PASO. Creo que lo tengo merecido por mi experiencia y compromiso a lo largo de todos estos años”, argumentó Scioli, que, además de ser embajador, fue ministro de Desarrollo Productivo durante un breve período y antes gobernador de la provincia de Buenos Aires por ocho años.

“Veo distintas opiniones o pedidos de candidato único. Yo quiero competir y creo que me gané el espacio”, dijo el funcionario.

Además, consideró que, “si hay un espacio político que necesita ampliar y dirimir diferencias democráticamente en este contexto, es el Frente de Todos”.

“Hay que garantizar las PASO para que todos aquellos que tengamos aspiraciones dirimamos democráticamente y que el pueblo argentino sea el que ordene las candidaturas”, consideró el exmotonauta.

Scioli aprovechó la oportunidad para enviar un saludo a todos los trabajadores en su día. “El trabajo no solo es el gran ordenador social, sino la base fundamental de mi propuesta de agenda de desarrollo hacia el futuro y que estoy planteando como alternativa a quienes quieren dinamitar todo, recortar la educación pública o cerrar el Banco Central”, destacó.

El FdT ya tiene dos precandidatos lanzados a la carrera: Scioli, por un lado, y por el otro, el líder de la Unión de Trabajadores y Trabajadoras de la Economía Popular (UTEP), Juan Grabois, quien anunció que solo se bajará de la contienda si la vicepresidenta de la Nación, Cristina Fernández, decide presentarse, a pesar de que ya negó que fuera a hacerlo, o si se presenta otro ­precandidato que tenga la venia de la mandataria y exprese un plan de gobierno según su pensamiento.