Las acciones se centralizan en calle 10 Este entre 162 y 164 y constan en el recambio de 300 metros de antiguas cañerías de hierro fundido de 75 milímetros de diámetro por modernas de Polietileno de Alta  Densidad (PEAD) de 90 milímetros de diámetro.  

Al cambiar tanto la calidad del material del caño como el tamaño del mismo, se logra una mejor circulación del agua por la red y se evitan futuras incrustaciones.

El recambio de cañerías precisa de tres etapas: en la primera se realizan pequeñas intervenciones sobre las veredas para realizar las acciones de cateo que sirven para referenciar la ubicación exacta del caño, confirmar el material y tener un pequeño diagnóstico preliminar sobre el estado general e las tuberías en el sector. Luego, se procede al recambio propiamente dicho, el cual es efectuado con modernas tuneleras que reemplazan por tramos las cañerías existentes. En esta misma etapa se realiza la readecuación de las conexiones domiciliarias.

En última instancia, ya con las pruebas hidráulicas correspondientes y el servicio restablecido se efectúa la obra civil con la restauración de las veredas intervenidas.

Durante los trabajos, a los frentistas solo se les interrumpirá el servicio de agua los días que se lleve a cabo el tendido y con la comunicación previa correspondiente.