Momento de extrema tensión se vivieron ayer en la ciudad de Berisso, cuando un perro de raza pitbull protagonizó un sangriento episodio. Todo terminó en la muerte de la mascota de un vecino y del propio can, que fue ultimado a disparos por un efectivo policial.

Fuentes oficiales indicaron que el hecho sucedió en 28 y 164. El personal de la motorizada, que se encontraba recorriendo la zona, escuchó gritos de auxilio provenientes del fondo de una casa. De inmediato se dirigieron hasta el patio del inmueble, donde divisaron a un perro pitbull atacando a otro de menor porte, el cual pertenecía al dueño de la residencia.

Los uniformados trataron entonces de separar a los canes, pero el primero, fuera de sí, hizo caso omiso y seguía atacando violentamente a la mascota del damnificado. No obstante, la secuencia dio un giro inesperado cuando el perro se metió adentro de la vivienda del hombre y comenzó a provocar varios destrozos, dirigiéndose hasta la cocina.

Fue allí cuando el pitbull acabó con la vida del otro perro. Entonces, vieron agotadas todas las instancias posibles: el animal seguía agresivo, con claras intenciones de atacar al dueño de casa. También, temían que el animal pudiera lastimar al hijo pequeño de la familia (de solo dos meses). Por lo tanto, uno de los policías efectuó dos disparos con su arma reglamentaria, impactando ambos proyectiles sobre el pitbull, matándolo al instante.