La discusión por el desdoblamiento electoral agudiza la interna en el peronismo bonaerense

El debate sobre la suspensión de las PASO en la provincia de Buenos Aires se pospuso una vez más en la Legislatura, reflejando la profunda interna dentro del peronismo. Aunque inicialmente la discusión giraba en torno a la eliminación de las primarias, ahora el verdadero conflicto radica en la fecha de las elecciones generales. El gobernador Axel Kicillof insiste en desdoblar los comicios para fortalecer su autonomía, mientras que el kirchnerismo y La Cámpora buscan mantenerlos en simultáneo con la elección presidencial, prevista para el 26 de octubre.

La senadora Teresa García, cercana a Cristina Kirchner, presentó un proyecto que establece la coincidencia de las elecciones bonaerenses con las nacionales, lo que fue interpretado como una afrenta directa contra la estrategia del gobernador.

Vale destacar que el gobernador tiene la facultad de fijar la fecha electoral sin necesidad de aval legislativo, lo que ha generado un clima de tensión creciente. En su entorno, sostienen que Cristina Kirchner y su espacio buscan responsabilizarlo ante una posible derrota electoral o una fractura definitiva del peronismo.

Las negociaciones han sido intensas. La semana pasada, delegados de los distintos sectores intentaron alcanzar un acuerdo que incluyera la suspensión de las PASO, pero el pacto se desmoronó cuando se presentó el proyecto de García. "Estaban en una mesa de negociación y la rompieron", se lamentaron desde Gobernación.

En el territorio, Kicillof cuenta con el respaldo de 47 intendentes peronistas que ven con buenos ojos el desdoblamiento, incluidos algunos afines al kirchnerismo, como Federico Achával (Pilar) y Gastón Granados (Ezeiza). "Los legisladores oficialistas se deben al gobierno provincial. No es la primera vez que el bloque peronista se manifiesta en contra de lo que pide el Gobernador", declaró Gustavo Barrera, intendente de Villa Gesell.

El tiempo apremia. Si bien la ley permite fijar la fecha electoral hasta 60 días antes de los comicios, la presión política empuja a Kicillof a tomar una decisión en los próximos días. En su entorno ya consideran la posibilidad de anunciar el desdoblamiento por decreto, lo que podría precipitar la fractura definitiva del peronismo bonaerense. Mientras tanto, el próximo 3 de abril será el día en el que desde la Legislatura se suspenda o no las PASO. A partir de allí, el mandatario bonaerense deberá decidir si desdobla o no.